No se siente un maestro, pero quiere llegar a serlo. Hoy se ve a sí mismo como un profesor que enseña a través del ejemplo. Durante años ha ayudado a personas a empezar con su entrenamiento e, incluso, ha sido ejemplo para que otros cambien su rumbo. El destacado luchador brasileño de artes marciales mixtas (MMA), Demian Maia, hoy un poco más alejado del cuadrilátero, también se dedica, por estos días, a dar charlas y dictar seminarios sobre aprendizaje, entrenamiento y jiu-jitsu.
Precisamente, en Chile se reunió con el equipo de Transbank en un conversatorio que dirigió el gerente general de la compañía, Patricio Santelices, denominado “Logra los Objetivos, con el fin de compartir y traspasar los valores que se aplican en el deporte a los equipos de grandes empresas.
Pero, ¿qué tienen en común las artes marciales mixtas o el jiu-jitsu con una oficina y el mundo laboral? La respuesta del deportista fue: “disciplina, coraje y trabajo en equipo. Lo más difícil es armar un buen team, porque todos pueden ser excelentes, sin embargo, si no trabajan en conjunto con estos valores, no funciona por más que sean un 10”.
El luchador, agregó que “en mi experiencia, prefiero trabajar con diversos profesionales todos cohesionados bajo el mismo propósito. Si somos capaces de dejar de lado los objetivos individuales por uno en común podemos llegar al éxito”.
Frente a esto, la Gerenta de la División de Personas, Asuntos Corporativos y Sostenibilidad, Isabel De Gregorio, señaló que: “aprendimos que en el jiu-jitsu la técnica es más relevante que la fuerza o la altura del oponente, y en este sentido toma mucha relevancia el rol y preparación del equipo, la planificación y eficiencia para afrontar los desafíos. Esta es la principal enseñanza que nos deja Demian Maia tras su visita a Transbank”, quien compartió su experiencia como luchador, coach y speaker con más de 300 colaboradores de manera presencial y remota.
Maia destacó que: “el ímpetu siempre varía, por lo que se vuelve sumamente importante generar hábitos. La motivación no siempre va a ser lineal, se viven altos y bajos. Esta no suele ser eterna, pero si tienes el hábito de continuar con consistencia y disciplina, puedes lograr tus objetivos”.
A sus 46 años, el deportista internacional indicó que su liderazgo se basa en enseñar con el ejemplo. Incluso con su vasta experiencia, dijo que debe hacerle caso y confiar en todo lo que su equipo le indique, “a pesar de ser el jefe”, señaló. “No me dejan comer un dulce extra y lo entiendo, lo hacen para que me pueda preparar bien para las competencias”, manifestó entre risas.
Finalmente, resaltó que el liderazgo se transforma en una señal de humildad constante de la que no se debe olvidar jamás alguien que está a la cabeza de un equipo, porque es lo que mantiene aterrizado y enfocado en los objetivos.